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Climatizacion

Los climatizadores y frigoríficos trabajan con compresores a base de electricidad cuya demanda de energía se incrementa cuanto más caliente está el aire por refrigerar. El principio básico de la refrigeración solar es aprovechar la energía solar que está de "sobra" para la refrigeración de edificios o dispositivos, especialmente durante las horas de más calor. La refrigeración solar ahorra electricidad y, al contrario de la calefacción solar, no tiene problemas de almacenamiento: la necesidad de refrigeración sube y baja casi simultáneamente con la oferta de la energía solar. Según aplicación se utilizan diferentes métodos de la refrigeración solar.

 

 

Óptima solución para cada temporada

Los frigoríficos pueden ser accionados o según el principio de la bomba de calor o según el método termoeléctrico. Las casas y habitaciones se refrigeran retirando agua del aire ambiental caliente a través de adsorción a materiales apropiados y así enfriándolas (frío evaporativo). Para que los materiales de adsorción puedan volver a recoger humedad serán secados por el calor que suministra el colector solar. Por lo tanto, el mismo colector solar puede aplicarse tanto para la refrigeración en verano como para apoyar la calefacción en invierno.
Mientras la obtención de calor solar está extendida las posibilidades de la refrigeración solar se subestiman en la discusión pública ni apenas se encuentran en la literatura popular alemana. Al menos en las zonas tropicales y subtropicales la climatización solar tiene un gran futuro por delante.

 

 

 

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